Después de las anteriores modificaciones, relativamente sencillas en las que logré montar una correa dentada a modo de transmisión desde el eje trasero al delantero, esta vez he decidido ir más allá y he reformado el chasis prácticamente por completo, se puede decir que ya casi no queda nada de origen.
Después de probar y afinar el otro T3, el Hummer con chasis PSR transversal, me pareció una idea que se podía adaptar al Touareg, y viendo como cada vez circulan más Pro Truck con este sistema, que tiene unas cotas bastante similares, pues de nuevo me he liado la manta a la cabeza y he iniciado otro trabajo de “marquetería”, o casi, puesto que todo ha sido a base de “Dremel” y lima.
Aquí podéis ver algunas fotos del resultado, totalmente artesanal. Lo curioso del caso es que por lógica, parece que la parte más complicada sea la reforma del chasis para la nueva ubicación del motor y componentes, nada más lejos. La verdadera batalla me la ha dado la correa trasera, que por temas de espacio y por minimizar la reforma de la estructura principal del chasis, tuve que montar el eje de transmisión por detrás del motor, en lugar de hacerlo por delante como es habitual, el resultado es que la distancia entre dicho eje y el tren posterior es bastante reducida, he aquí el problema, nadie dispone de una correa dentada suficientemente corta.
Cuando ya daba por imposible montar una correa dentada, e incluso me planteaba la modificación del chasis, hice una simple prueba, y por el momento es resultado no es nada malo. Algo tan simple como un tensor para la correa, aunque montado con refuerzos a ambos lados para evitar una rotura, de momento se comporta bastante bien.
Superado, al menos en parte, el problema de la correa posterior, venia algún que otro quebradero de cabeza, como la colocación de los cables, los cuales he tenido que proteger en varios puntos con cinta de fibra de vidrio, básicamente para evitar roces y que varíen su posición de forma inadecuada.
Por fin llegamos al último paso, y como no, tampoco iba a resultar sencillo, y no es otro que añadirle los contrapesos. Debido a las reformas en la estructura del chasis, se ha visto bastante mermada la superficie para montarlos, después de echarle un poco de imaginación (ya puestos...) y añadir varios apoyos en las zonas interiores, he podido añadir varias placas de plomo en diferentes puntos del chasis.
Con la anterior configuración, el peso del conjunto se quedaba justo por debajo de los 160 gramos, después de esta transformación y todo el proceso comentado, como podéis ver, incluso he logrado ganar algunos gramos, lo cual no está nada mal.
Por último, sólo me queda mostrar las fotos del coche otra vez montado y listo para una nueva batalla.
Espero que os haya gustado el reportaje, únicamente me queda comentar, que la idea que tengo en mente es hacer unas cuantas pruebas con él, al menos y si puedo, lo probaré en el próximo Tamaraid que ya está a la vuelta de la esquina, y si consigo tener buenas sensaciones con el “invento”, lo siguiente será desmontarlo completamente para hacer un nuevo chasis a partir de este, intentando corregir errores y dándole una apariencia un poco menos precaria o artesanal.
Que buen aporte :D
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